Motivos

Otro día más... Ya habían pasado dos días desde ese día, desde el día que puse en peligro la vida de Matthew. Sabía que era un simple humano, pero me atreía... TANTO, era una cosa no-normal en mí, no podía gustarme un simple humano.. Tenía que decirle qué era o lo averiguaría él sólo y eso hace rabia. Vi que entraba por la puerta y lo seguí pero él me evitó. Intenté hablar con él, pero siempre tenía alguna excusa, ¿por qué me evitaba? ¿Había decidido olvidarme en serio? No podía ser, tenía que contarle quién era... lo que era. Lo paré en medio de un pasadizo y me lo llevé al patio a rastras.

- Ahora te contaré porque soy un peligro para ti.

Tenía que evitarla, no quería saber el porque, lo había decidido, había decidido relacionarme con gente normal, no con gente que me habla de peligros y cosas raras. Había estado todo el día evitandola hasta que, por culpa mía, me paró y me llevó a un lugar alejado, diciéndome que me diría porque era peligrosa.

- Claro... No, Lilith, se acabó, estoy cansado de esperar algo de ti y que solo me digas que eres peligrosa, o que no puede ser, o que no me amas. Yo te quiero, pero si tengo que aguantar mucho más tiempo así, no lo resistiré, así que si tienes que darme motivos, que almenos sean buenos.

¿Qué tenía que decirle? ¿Que era un vampiro?

- Espérame esta tarde, te lo contaré TODO... Todo... Cuando todo el mundo se haya ido, esperame en los parkings, si tú no estás, yo te esperaré.

Podía huir...

- Vale. Ahí estaré.

Pero mejor no, ¿por qué tenía que huir? No perdía nada, quizás me lo dijese, quizás me disparase con una pistola, quizás, quizás, quizás... Después de las clases me planté en el garaje, delante de su coche, esperándola... Pero no apareció hasta el cabo de dos horas, se acercó a mí.

Llegué más tarde expresamente. Me acerqué a él y le dije:

- De acuerdo. ¿Estás seguro?

Asintió levemente.

- Vale, cógete fuerte a mi mano. O si quieres, simplemente, sube aquí atrás -Le señalé mi espalda.

¿Q-q-qué? ¿Dónde me llevaría? Opté por cogerle la mano fuertemente, ya que tampoco quería que me llevase una chica e_e

- ¿Tienes miedo? -Me preguntó.
- No -Mentí.

- Que mal mientes.

Le apreté fuertemente la mano y empecé a correr, casi a volar, llevándolo a mi lugar secreto, un lugar escondido en el bosque.